Así lo ha manifestado Rafael Catalá, Ministro de Justicia, destacando que el ejecutivo va a impulsar esta práctica a partir de acuerdos con los grupos parlamentarios y entidades que trabajan en este ámbito con el fin de mejorar el funcionamiento de la Administración de Justicia.
Catalá se ha mostrado partidario de establecer una regulación adecuada sobre tres ejes – calidad, difusión e incentivos- que ofrece la mediación con el fin de vencer resistencias y dar a conocer esta solución extrajudicial. Así mismo, ha recordado que ya se han dado pasos importantes al respecto como son el de dotar a España de un marco regulatorio hasta ahora inexistente y la creación del Registro de Mediadores e Instituciones de Mediación en el que ya se encuentran dados de alta 145 colegios profesionales, 80 entidades aseguradoras y 247 centros de formación.
La mejora de la mediación pasa, incuestionablemente, por la mejora de la formación práctica y la experiencia de los profesionales de este ámbito. Con este fin, ha solicitado el apoyo de las asociaciones para valorar la formación necesaria.
En relación con la necesaria difusión de la mediación, Catalá ha manifestado su disposición a colaborar con las asociaciones que trabajan en este ámbito y a apoyar la línea abierta por el CGPJ en sus campañas informativas. Lo importante es trasladar al ciudadano el litigio no es la única forma de resolver las controversias.
Asimismo, ha señalado que no debe dejarse de lado la necesidad de establecer una serie de incentivos que animen al ciudadano a recurrir a la mediación. Las posibilidades incluyen desde la realización de sesiones informativas, a la obligatoriedad de la mediación a instancias de un juez, sin olvidar la repercusión que pudiera tener en una condena en costas el rechazo a llevar a cabo una mediación.
Por último, el ministro se ha mostrado favorable a la creación de un Consejo Asesor en el que estén representados todos los agentes sociales implicados en esta materia.
