Aunque las consecuencias negativas de Covid-19 ganan con creces, la pandemia también ha traído consecuencias positivas y el medio ambiente es uno de los principales beneficiados. Las restricciones, sumadas a la obligada reinvención a que se han tenido que someter empresas, autónomos y trabajadores, ha tenido un impacto muy favorable en nuestro entorno. El teletrabajo, el aumento de las ventas online y la reducción de los viajes por motivos de trabajo han contribuido significativamente a ello. Así lo señala un reciente estudio realizado por la fundación Vida Sostenible, en el que se ha comparado el impacto medioambiental y las emisiones asociadas a las actividades empresariales antes y después de la pandemia.
Tomando como base este informe, la fundación ha elaborado la “Guía de Buenas Prácticas para Pymes y Autónomos”, publicada por el ministerio de Trabajo y de la que hoy recogemos sus principales medidas. Sin duda, el teletrabajo ha llegado para quedarse, pero el documento va un paso más allá, plateando acciones concretas que se deberían aplicar, también, cuando se trabaja en remoto.
Cinco son los componentes medioambientales que se verían implicados en las medidas que propone esta guía: agua, energía y cambio climático, residuos y materiales, riesgos tóxicos y salud, sociedad y paisaje. Y cinco son también las actividades de la empresa en las que estas propuestas se podrían poner en marcha: limpieza, mantenimiento y mobiliario, iluminación y climatización, equipamientos y operación de equipos, gestión y RSC y movilidad, transporte y distribución.
Medias para mejorar el medioambiente mientras trabajas
- Una mejor iluminación del espacio. Tanto en la oficina como especialmente en casa, si estás teletrabajando, se debe adaptar la zona en la que realizarás tu jornada laboral. Lo ideal es buscar la luz natural y si no es suficiente, utilizar luces led.
- Control de la energía utilizada para la climatización. La guía aconseja establecer horarios y comparar empresas suministradoras y si es necesario, cambiar contratos para reducir el consumo.
- Apoyo de la empresa en el espacio del teletrabajo. La compañía debe ayudar al empleado a que tenga un buen clima de trabajo en remoto, proporcionándoles equipos de buena calidad, ergonómicos y eficientes.
- Mejora el contrato de suministro eléctrico. Revisa con detalle la factura eléctrica, examina el mercado en busca de información sobre ofertas de electricidad verde y evita tarifas eléctricas planas, que además de no ser tan ventajosas como aparentan, desincentivan el ahorro energético.
- Buen uso y compra (si es necesario) de equipos informáticos eficientes. Considera el ahorro de energía como un factor determinante en la compra de equipos. No subestimes tampoco factores como la reparabilidad, la ausencia de compuestos tóxicos en su composición o su adecuación a las normas del comercio justo y la ética empresarial.
- Teletrabajo saludable. Al estar en casa es fácil que la alimentación del empleado se resienta. El abuso de comida basura, el picoteo, el tabaquismo o el sedentarios pueden afectar muy negativamente a la salud. Por ello, el estudio anima a las empresas a que elaboren una guía en la que se fomente el estilo de vida saludable.
- Reducción de residuos. El reto Zero Waste consiste en el cambio de hábitos a la hora de comprar determinados materiales y fundamentalmente, que el reciclaje se convierta en una rutina de obligado cumplimiento en el hogar.
- Eliminación de los compuestos tóxicos del ambiente. Se trata de ir suprimiendo paulatinamente el uso de limpiadores, lejías o quitagrasas y sustituirlos por productos más naturales como el jabón o el vinagre.
- Mejora del transporte. Fomentar entre los empleados el trasporte público, la bicicleta, caminar o compartir vehículo entre los compañeros, para los desplazamientos de casa al trabajo o cualquier otro trayecto que deba hacerse en horario laboral.
- Buena gestión de los desplazamientos de los clientes y proveedores. Igual que con los trabajadores de la empresa, se trata de ofrecerles alternativas de trasporte más sostenibles y ecológicas.
- Viajes por cuenta de la empresa. En la medida de lo posible, la empresa debería ofrecer servicio de lanzadera o rutas de autobús, que faciliten el transporte de los empleados, reduciendo el uso de vehículos particulares.
- Economía circular. Se debe tender a implantar poco a poco sistemas de producción sin impacto medioambiental, de manera que todo lo que se vaya instalando en la empresa se retroalimente y utilice energías renovables.
- Economizar agua y energía. Lo primero es medir la situación actual y desde este punto de partida trazar objetivos concretos como, por ejemplo, la reducción en un 5% del consumo de agua y energía. A partir de diseña una estrategia con los aspectos que se pueden modificar para conseguirlo.
- Mejora de los empaquetados y embalajes. Los envases deben ser siempre biodegradables, compostables o proceder de materiales reciclados.
- Buscar alternativas digitales para los materiales informativos. Las cartas o comunicados en papel deben ser desterrados definitivamente y sustituidos por reuniones presenciales u online, envío de correos electrónicos, etc.
- Organización de la distribución de paquetería. Se deben establecer los mecanismos para que las entregas se hagan a la vez, para no fomentar los “viajes de más”.
- Vehículos sostenibles. La guía aboga por ir sustituyendo las flotas antiguas por vehículos electrónicos o híbridos.
- Proveedores de cercanía. En la medida de lo posible, se debería buscar empresas proveedoras cercanas y que apuesten por la sostenibilidad.
- Objetivo: ser una empresa ODS (objetivos y metas de desarrollo sostenible) y ejemplo de sostenibilidad. Siempre es posible buscar nuevas vías para conseguir la sostenibilidad, sea cual sea la actividad de la empresa y cualquier medida que se tome al respecto significará un pequeño paso para la mejora del medioambiente.
- Cultura empresarial saludable y sostenible. Se deben establecer los mecanismos y estrategias necesarios para que tanto los empleados como los clientes se impliquen activamente en la protección del medioambiente.