2020 está siendo, a todos los efectos, un año completamente atípico. La aparición del virus Covid-19 y la pandemia que ha creado ha obligado al mundo entero a cambiar de paradigma, a aceptar la incertidumbre y a adoptar ciertas costumbres con el objetivo de frenar la expansión del virus.
La instauración forzosa del teletrabajo, el distanciamiento social o el considerable aumento de las compras por internet desde el pasado mes de marzo, son algunos de los aspectos que, indudablemente, han afectado a las empresas que ven cómo sus planes para el año se han visto forzados a replantearse dado el contexto actual.
En ese sentido, el principal reto de las empresas no podía ser otro que la digitalización. Muchas de las pequeñas y medianas empresas, que quizá estaban algo más rezagadas en ese aspecto, se han visto forzadas a digitalizar sus procesos durante estos meses. Ello ha llevado a que, para lo que queda de año, muchas vean la digitalización no como una opción, sino como una necesidad urgente que tienen que llevar a cabo a la mayor celeridad.
Unido a este aspecto, se visualiza el reto de la formación y la reinvención. Difícilmente una pyme podrá acometer el reto de la digitalización si su jefe o sus mandos directivos no están familiarizados con los nuevos procesos digitales. Para ello será necesario llevar a cabo distintas sesiones de formación, esta vez sí a todos los niveles de la empresa, para asegurar igualmente que nadie se queda atrás en ese sentido.
Empresas familiares
En el caso de las empresas familiares, que suponen el 88% del tejido empresarial en nuestro país, la incertidumbre, las circunstancias y los retos son comunes al del resto de pymes españolas.
En estos casos, y dependiendo del tamaño con el que cuenten estas compañías, la recomendación es la de trazar una hoja de ruta que permita gestionar tanto la empresa familiar como el patrimonio particular. Igualmente, un análisis estratégico y global de la empresa, ayudado de un asesoramiento empresarial especializado y multidisciplinar que tome distancia y evite los conflictos de intereses, es siempre una buena opción.