Uno de los puntos más conflictivos para todo aquel que tiene una empresa o que trabaja como freelance puede ser cobrar las facturas de los bienes o servicios que ofrece a sus clientes. Eliminar los riesgos de impago completamente resulta imposible, pero es cierto que sí que existen ciertas claves que nos ayudarán a reducir sustancialmente este riesgo y poder así disminuir esta preocupación de nuestro día a día.
Fija tú las normas y condiciones del cobro
No debes dejar que sea el cliente quien fije este punto, pues puede dar lugar a errores, malentendidos y a situaciones que es mejor evitar. En ese sentido, lo recomendable es que estudies tu negocio, tu competencia, tu mercado y tu situación financiera y, tras eso, definas la política de cobros más conveniente para tu empresa. Deberás poner las condiciones siempre por escrito y asegurarte de que las comunicas correctamente.
Realiza un estudio previo y un seguimiento de tus clientes
Este punto va a depender de las características de cada cliente, pero, si la ocasión lo requiere, no está de más cotejar la solvencia del cliente para saber si va a poder afrontar el pago y realizar un seguimiento por si la situación de este cambia mientras tú realizas el servicio.
Evita dar crédito
Cobrar por adelantado, aunque sea una parte, es una situación ideal para prevenir conductas morosas, pero es complicado de conseguir especialmente en función del tipo de negocio. En cualquier caso, puedes probar a realizar ciertos métodos que favorezcan esta conducta: dar un presupuesto previo y no empezar a trabajar hasta que no se ha recibido un adelanto o, de una forma más creativa, puedes ofrecer a tus clientes descuentos, pluses o bonus que incentiven esta forma de pago.
Factura enseguida
En cuanto hayas terminado de prestar el servicio es recomendable que emitas la factura, de esta forma evitarás que pase el tiempo y se retrase el cobro.
Elabora un protocolo de actuación
En el caso de que trabajes en una empresa y no seas freelance, no está de más elaborar un breve protocolo que contribuya a prevenir impagos. En este deberás recoger una serie de reglas a seguir por todas las personas que trabajen en tu empresa con el objetivo de que no existan dudas y se unifique la forma de actuar ante esta situación.
