La Asociación Europea de Asesores Financieros (EFPA) ha acreditado en 2017 a 11.421 profesionales en España, casi al doble que el año pasado. MIFID II, la normativa fijada por la UE, que entrará en vigencia en enero de 2018, establece unas cualificaciones mínimas para unos 60.000 empleados de la banca.
Aunque esta no es la única institución de entre los certificadores aprobada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores, si es la más numerosa. Los cálculos apuntan a que más del 30% de la plantilla del sector financiero, unos 60.000 trabajadores, deberán pasar por una evaluación similar a la que ofrece esta asociación.
Según ha determinado la CNMV, el número mínimo de horas de formación será de 80 para el personal que ofrezca información y de 150 para los asesores. En España existen 21 universidades y centros de formación que cuentan con la acreditación de EFPA para la preparación de los candidatos al examen. A lo largo de 2017, 14 ciudades españolas han acogido 25 convocatorias con una tasa de aprobado que ronda el 65%.
Al aprobar los exámenes, los empleados de la banca acreditan que cumplen con los conocimientos que exige la nueva normativa europea, MiFID II, que regula, entre otros aspectos, la comercialización de productos de inversión, la prestación de servicios de asesoramiento y la gestión de carteras.
En la actualidad, el 75% de los asesores de la banca tienen formación universitaria y un 49% se encuentra acreditado por algún certificador externo. Entre los empleados que informan a los clientes sobre productos y servicios, apenas el 7,1% está validado por un tercero.